METÁFORA DEL TELÉFONO MÓVIL

Un Cristiano comparado con el teléfono móbil

Esta es una metáfora descrita por mí, en relación a la vida de un cristiano relacionado con Dios. La verdad es que somos unstrumentos útiles en las manos de DIos. Alguno talvés se pregunta: ¿Entonces, somos un artículo en las manos de Dios? Quizá alguien piense que al final de cuentas, Dios sólo nos quiere usar. ¡No!, no es así. Dios tiene su lugar en autoridad, gobierno y soberanía. Nada de lo que nosotros seamos o hagamos cambia la posición en la cual Dios se encuentra. Al contrario, somos nosotros los que llegamos a tener una posición privilegiada en El. Todo depende de cómo nos identifiquemos, y cuanta cercanía tengamos hacia El.
El asunto es que estemos a la mano, en cuanto a Dios se refiere. Que estemos a su entera disposición y cuando él nos necesite. Es un asunto de identidad y comprensión del porqué de nuestra vida sobre la tierra. De cuanto podemos hacer en favor de otros, y de ser usados por la mano de Dios para transmitir su mensaje de amor al corazón de los que están conectados, o se conecten con nosotros.

¿Cómo estás hoy, en lo que concierne a tu servicio? ¿Cómo suenas cómo teléfono conectado a Dios? ¿Estás listo para transmitir las buenas nuevas a los demás? Esto es lo más importante. ¡Aló! ¡Aló! ¿Hay alguien del otro lado de la linea? ¡C O N E C T A T E!

INCONGRUENCIA DE VALORES

Incongruencias de Valores

Escribí estas diferencias hace algún tiempo atrás, y me parece necesario compartirlo con ustedes en este medio. Primero, porque no sólo lo sé, sino que lo he creído, y lo tengo por convicción personal.
Muchas veces las cosas en nuestro mundo exterior se enfatizan por lo que se vé. En ocasiones, la gente se deja llevar por lo que las diferentes corrientes de intereses humanos nos presentan. Es difícil para muchos ver la diferencia de este mundo terrenal, y la oferta del reino de Dios a través de el evangelio de Jesucristo.
Lo de este mundo perece, lo de Dios permanece. Lo terrenal es pasajero, lo espiritual es eterno. Lo material nos detiene en ansiedad y depresión; sin embargo, lo que no se ve con los ojos físicos nos da esperanza y aliento de vida.
Lo incongruente está en las cosas contrarias a lo que la razón nos dictamina. Esto no es asunto de lógica, sino asunto de fe. Dios llama a las cosas que no son como si fueran, porque sólo por el aliento de su voz todas las cosas subsisten.
Donde te encuentres hoy, y cuales quiera sean las circunstancias alrededor, piensa en la necesidad de tener valores imperecederos en el corazón. Cosas por las cuales debemos estar en pie y vencer. Situaciones que son incomprensibles al entendimiento natural, se convierten en desafíos para escalar hacia una posición de poder en Dios. Dijo un profeta hace muchos años, y sus palabras quedaron registradas en la Biblia: «No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu ha dicho Jehová de los Ejércitos.» Zacarías 4:6.
Tus valores determinan lo que eres. No es delante de los hombres, porque ante ellos puede que estés mal; sino delante de Dios, quien ha establecido las leyes espirituales por las cuales no da la capacidad de vivir confiados en El.