AMOR INCONDICIONAL

PRIMER MENSAJE

«Y esta es la condenación: Porque la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz; porque sus obras eran malas.” -Juan 3:19.

El amor es una esencia divina y sublime que fue transmitida á todas las criaturas desde su principio. El amor es el sello del Creador marcado en la parte anímica, en toda la creación. El amor fue puesto como un designio divino en la responsabilidad de la obediencia á la fe que determina la salvación personal. El amor tiene que ser probado por las circunstancias, para que finalmente brille y reluzca la calidad y firmeza de su esencia; de lo contrario, quedará en el olvido. Igual que todas las virtudes y cualidades humanas. El amor ha sido afectado á causa del pecado; por lo cual, ha hecho decaer la naturaleza de todas las criaturas en todas sus esferas. Por lo tanto, el hombre ama más lo que está en tinieblas, que lo que está en la luz. El amor es una semilla divina que se siembra, se cultiva y se deja crecer hasta fructificar. No obstante, el amor pierde su fuerza de reproducción, por falta del alimento de la luz.

¡Que amas, es lo que determina tu destino en la vida! — Por lo tanto, el amor á Dios es intrínseco en la naturaleza de aquel que lo conoce íntimamente. La Biblia dice: “El que no ama, no conoce á Dios; porque Dios es amor.” -1 Juan 4:8. — Dios es el fluir único, del amor y la influencia poderosa que le da vida al respeto, la obediencia y la fidelidad. Ignorar el origen del amor, es quitarle á la vida misma el potencial del producto esencial de la felicidad en Dios. Porque la naturaleza divina en Dios es el amor; su esencia es perfecta, justa y eterna. Dios no cambia ni distorsiona su esencia de amor en su existencia. Lo sublime y excelso del amor divino, nunca pierde su esencia y fuerza original. Dios fue, es y será la esencia del amor perfecto. En el amor divino está el refugio de la luz perfecta y la verdad eterna. Por lo tanto, cuando el hombre vuelve á Dios, encuentra su razón de ser en el refugio del amor divino.

El amor en el lenguaje natural entre los seres humanos, se ha ido perdiendo y cambiando conforme á las características de su naturaleza carnal. Mientras el ser humano se aleja por sí mismo del conocimiento de Dios, su énfasis está egoístamente enfocado en la satisfacción egocéntrica de su naturaleza. El hombre cambió el enfoque, la razón y el propósito del amor divino, por lo que él mismo ha considerado más importante en su existencia, antes que aquel que le da sustento de vida y salud. La preferencia de la naturaleza carnal humana se ha enfocado en su propio entendimiento del amor. El amor divino es más que un conocimiento inteligente; sobre todo, cuando se experimenta de manera práctica en todos los niveles de la vida. Es necesario hacer la diferencia de las cualidades del amor humano y el amor divino, para comprender la magnitud de la esencia que genera.

Dios ya determinó y demostró su amor para ser amado. Dios ya fijó los límites de su amor en las condiciones que estableció para el beneficio humano. Dios ama en un eterno presente, y su amor es hasta el infinito. El amor divino se manifestó en dar á su Hijo; y con ello lo dio todo, en una manifestación perfecta y absoluta. Dios tenía la potestad del rechazo, el castigo, y la repulsión de sus criaturas; porque Dios es soberano. Dios tiene todo el derecho de hacer lo que quiera, y deshacer y desaparecer lo que quiera, porque Él es el Creador. Dios no es arrogante, perverso y cruel; nada de eso es parte de su naturaleza. Dios no obra por instinto ó inconsciente de su naturaleza, sino por la fuente de su corazón sensible de amor condicional y compasión intencional. El hombre que no conoce á Dios, no puede comprender su corazón y sus intenciones de amor. Es lo mismo que afronta el ser humano con los suyos; mientras no vive con alguien, no lo puede conocer íntimamente.

El amor de Dios al mundo quedó demostrado; al enviar condicionalmente á Jesús, para morir y pagar por la salvación del hombre de la condenación eterna. El amor de Jesús quedó demostrado, al llegar á la cruz y morir sujeto incondicionalmente, al amor del Padre que lo envió. El amor del creyente tendrá que ser comprobado por la obediencia y el sacrificio de su condición de entrega á Dios. Todo ya fue concluido de parte de Dios; y no hay nada más que se pueda hacer, aparte de lo que Jesús hizo por nosotros con su sacrificio. Lo que resta hacer humanamente hablando, es creer, recibir y abrazar la manifestación del amor divino á través de Jesús. La condenación está relacionada con la triste realidad de la incredulidad y el amor humano hacia lo terrenal y mundano. No aceptar y amar la luz de Jesús, respecto al amor de Dios, hace punible al ser humano por el rechazo del regalo de salvación y vida eterna entregado por la humanidad.

*Los versos bíblicos corresponden á la versión Reina Valera.

Si desea compartir y copiar todo ó una parte de estos escritos, por favor de crédito al autor de ellos con el nombre: http://www.ovidiobarrios.org

Publicado por ovidiobarrios

Me considero dichoso de tener una familia integrada, principios cristianos; y sobre todo, de tener mis metas y mis sueños enfocados en lo que creo. Esta vida es para aprender a vivirla con entusiasmo y energía. Sobre todo, considerando a aquel que nos sostiene con aliento de vida desde que nacemos, hasta que demos el último suspiro. Dios es el creador de todo. Es el autor de la vida y de todas las cosas que nuestros ojos pueden ver. Dios no es la naturaleza. Dios es el creador de la naturaleza. El es invisible, sabio, omnipotente y misericordioso. Su gracia se muestra en el amor por medio de Jesucristo, el Señor. Su vida entregada en la cruz, es la muestra mas grande de amor para toda la humanidad. Sencillamente, "el don inefable de Dios."

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