LOS FRUTOS (Primera Parte) 

La Biblia enseña la vida humana basada en comparaciones. Es muy común encontrar en la Biblia los ejemplos de la naturaleza comparada a la actividad normal de los seres humanos. Una de esas comparaciones bíblicas, son los frutos de las plantas asemejado con los resultados de lo que el ser humano siembra. El propósito de estas semejanza es demostrar con la enseñanza natural, lo que sucede en lo espiritual. Las porciones bíblicas traen más luz de las verdades que se viven día a día, y que deben traer entendimiento al corazón de aquellos que se aplican a ellas. Siete verdades de Jesús respecto a los frutos, ubican la perspectiva del caminar diario en el producto de los hechos. 

1-FRUTO DE IDENTIDAD: «El árbol se conoce por sus frutos…» Decía Jesús. No se trata de la apariencia del árbol por frondoso que parezca, por su altura, su tronco, sus raíces, el tamaño de sus ramas, y más; el árbol solo se conoce por sus frutos. Las características y cualidades del árbol pueden ser distinguidas solamente por su producto en sus ramas. La verdadera identidad de lo que la persona es, solo se puede saber a través de sus frutos. No hay nada que aparentar cuando el cristiano sabe qué clase de semilla le dio Dios en la vida. 

ENSEÑANZA: No te dejes llevar por lo que externamente miras de una persona. En el tiempo de demostrar actitudes, hechos y palabras; es cuando una persona muestra lo que verdaderamente es. No confíes solo por lo que veas exteriormente, porque conforme el tiempo se manifestará la verdad de los frutos de una persona. 

«Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los abrojos?» -Mateo 7:16. 

«Así que, por sus frutos los conoceréis.» -Mateo 7:20. 

«O haced bueno el árbol y bueno su fruto, o haced malo el árbol y malo su fruto; porque el árbol es conocido por su fruto.» -Mateo 12:33. 

2-FRUTO DIGNO DE ARREPENTIMIENTO: El arrepentimiento es una actitud interior del corazón, y tiene características que se manifiestan en los hechos. El arrepentimiento no es un hecho, si solamente se expresa en palabras. El arrepentimiento se dignifica a través de actitudes externas que se dan a la vista de la persona ofendida. Lo que salga del corazón a través de los hechos, será lo que aumentará la realidad de un arrepentimiento. El arrepentimiento es un fruto de un corazón con pesar de sus hechos equivocados. 

ENSEÑANZA: Mirar la actitud de otros hace que cada persona auto examine sus propios hechos. No esperes ver en otros lo que quizá aún no se ha manifestado en ti. Dios no se deja llevar por lo externo, porque Él ve el corazón. El ser humano necesita ver los hechos de otros, porque no conoce el corazón de sus semejantes. 

«Producid, pues, frutos dignos de arrepentimiento;...» -Mateo 3:8. 

3-FRUTO BUENO Y FRUTO MALO: Toda persona produce frutos en su manera de vivir, sean buenos o malos. Cada quien sabe que es lo que espera ver en relación a las personas con quienes convive, incluyéndose él mismo. Con los seres humanos es lo mismo que con los árboles, tal y como sea la persona, así serán sus frutos. De acuerdo al estado del árbol, así serán sus frutos. Toda forma de vivir tiene sus consecuencias. Toda vida tiene un final y solamente algunos son los que llegan a un final antes de tiempo. Los acontecimientos negativos en la vida de algunas personas, no es más que el resultado de su desobediencia y su rebelión a los propósitos de Dios. 

ENSEÑANZA: Hay que vivir consientes de los propósitos de la vida. Hubo alguien que plantó en la tierra tu vida, para que pudieras traer una semilla que produzca. De la misma manera que fuiste plantado, llegará el día que serás cortado. Nada es permanente en esta tierra, y todo tiene un límite de vida para producir. Vive con propósitos, y honra al dador de la vida con tus buenos frutos. 

«El hacha ya está puesta a la raíz de los árboles. Por tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado al fuego.» -Mateo 3:10. 

«Así también, todo árbol sano da buenos frutos, pero el árbol podrido da malos frutos.» -Mateo 7:17. 

«Todo árbol que no lleva buen fruto es cortado y echado en el fuego.» -Mateo 7:19. 

4-FRUTO SIN CONTRADICCIÓN: Hay cosas que se ven y no llaman al engaño a nadie. Por resultado lógico, no puede haber contradicción en los procesos que se dan siguiendo el orden correcto de las cosas. Nada en lo natural puede reproducir dos naturalezas distintas. Lo bueno reproduce lo bueno, y lo malo reproduce lo malo. Cualquiera en sus cinco sentidos verá en el producto la naturaleza que lo produjo. 

ENSEÑANZA: Comprueba por ti mismo que clase de árbol eres. Toma un tiempo para reflexionar en los frutos que tu vida ha traído hasta el día de hoy. Considera que mientras hay vida, hay esperanza de restauracion. Tanto lo bueno como lo malo dejan consecuencias a los más cercanos. 

«El árbol sano no puede dar malos frutos, ni tampoco puede el árbol podrido dar buenos frutos.» -Mateo 7:18. 

5-FRUTO AUSENTE: Si la semilla del árbol corresponde a un género productivo —¿Porqué no puede el árbol dar de sus frutos en su tiempo? —Claro está, si un árbol de quién se espera que dé buenos frutos; y al contrario, lo que da son malos frutos; entonces, será cortado. Así mismo, si el árbol debiendo producir no produce, también será cortado. Muchas veces, son otras cosas las que están robando el alimento; por lo cual, la planta deja de producir. Siendo productivo, si un árbol se hace improductivo, pierde la bendición de su propósito. 

ENSEÑANZA: Dios no maldice a nadie, casi siempre son las cosas revertidas las que traen la maldición sobre las vidas, y éstas dejan de producir. Dios no permite el dolor y el sufrimiento como castigo, sino como disciplina para la corrección. Cuando ya la disciplina no trabaja en ninguno de los hijos, Dios aplica el corte o poda de la vida. Duele ver el fin de una vida; pero, para Dios es mejor que uno deje de sufrir, a que otros alcancen también la maldición del sufrimiento. 

«Y el que fue sembrado en espinos, éste es el que oye la palabra, pero las preocupaciones de este mundo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y queda sin fruto.» -Mateo 13:22. 

«Al ver una higuera en el camino, fue a ella; pero no encontró nada en ella sino sólo hojas, y le dijo: —Nunca jamás brote fruto de ti. Pronto se secó la higuera,…» -Mateo 21:19. 

6-FRUTO EN PORCENTAJE: la parábola del «Sembrador» que Jesús enseñó, tiene una gran metáfora en el porcentaje de los frutos. La semilla puesta en el terreno tiene la capacidad de llevar vida al 100%. La pregunta es: —¿Porque razón hay distinta cantidad de frutos del producto sembrado?. —La respuesta está en la recepción de la semilla sobre la tierra que aprovechó su preparación. Dios da las mismas oportunidades; pero, no todos aprovechan sus beneficios por igual. La preparación de la tierra es un proceso humano muy duro, y el riego es un proceso divino en el tiempo exacto de la siembra. Ambos procesos combinados de preparación para la tierra por sembrar, permitirán la reproducción adecuada de las semillas. 

ENSEÑANZA: Sepamos que la tierra sin preparación recibirá las mismas oportunidades que el terreno preparado; pero, no podrá llevar los mismos resultados. Nadie siembra semillas, solamente porque tiene terrenos disponibles. Las semillas se siembran si los terrenos se consideran buena tierra. El sembrador sabe que la tierra obligadamente se prepara para recibir la semilla. Si Dios quiere frutos en tu vida, tendrá que trabajar en los terrenos de tu corazón. El porcentaje más alto de la reproducción de la semilla, siempre vendrá de aquellos terrenos que fueron preparados y recibieron la lluvia de la bendición de Dios. 

«Y otra parte cayó en buena tierra y dio fruto, una a ciento, otra a sesenta y otra a treinta por uno.» -Mateo 13:8. 

«Porque la tierra que embebe el agua que muchas veces vino sobre ella, y produce hierba provechosa á aquellos de los cuales es labrada, recibe bendición de Dios:…» -Hebreos 6:7. 

7-FRUTO AMENAZADO: Todos sabemos los riesgos que se corren al sembrar. Aunque nadie siembra pensando en los desafíos que pasarán las cosechas; no por ello se deja de sembrar. Pueden haber factores de ambientes, de plagas, de falta de lluvias en oposición a la siembra; sin embargo, la siembra se hace. A pesar de factores que son necesarios para las semillas en su germinación, desarrollo, y producción; los más grandes enemigos de las semillas, son otras semillas en los mismos surcos. Jesús claramente enseñó por parábolas, que la cizaña fue sembrada en el mismo terreno, mientras los hombres dormían. La oposición casi siempre va paralela a la bendición en terrenos donde Dios está trabajando. La preparación del terreno, y el alimento a la tierra será lo que marque la diferencia. Dios no se equivoca en tomar los frutos buenos para su alimento, en vez de tomar lo que no corresponde a las siembras que Él mismo preparó. 

ENSEÑANZA: Casi siempre la oposición viene después de la bendición. El objetivo de la semilla mala como siembra entre la semilla buena, es para confusión, y amenazar con robo, destrucción, y muerte, a la semilla viene. ¡Alerta! —Solo habrá una forma de distinción entre las semillas, y ese es su fruto. 

«Cuando brotó la hierba y produjo fruto, entonces apareció también la cizaña.» -Mateo 13:26. 

CONCLUSIONES: Las verdades de Jesús venían presentadas a través de la naturaleza de las cosas que se ven día a día. La razón del énfasis en los textos de los Evangelios, se debe a las verdades eternas que Jesús enseñó respecto a los frutos, para ser aprendidas. La clase de fruto que sea presentada en los hechos, siempre revelará la clase de semilla que tiene cada persona. Procura alimentar tu vida de las semillas de Jesús como verdades eternas, y los frutos hablarán del resultado del terreno de tu corazón. 

Lea el tema: LAS SEMILLAS 

Si desea copiar todo, o una parte de este escrito, por favor de los créditos a: http://www.ovidiobarrios.wordpress.com 

Publicado por ovidiobarrios

Me considero dichoso de tener una familia integrada, principios cristianos; y sobre todo, de tener mis metas y mis sueños enfocados en lo que creo. Esta vida es para aprender a vivirla con entusiasmo y energía. Sobre todo, considerando a aquel que nos sostiene con aliento de vida desde que nacemos, hasta que demos el último suspiro. Dios es el creador de todo. Es el autor de la vida y de todas las cosas que nuestros ojos pueden ver. Dios no es la naturaleza. Dios es el creador de la naturaleza. El es invisible, sabio, omnipotente y misericordioso. Su gracia se muestra en el amor por medio de Jesucristo, el Señor. Su vida entregada en la cruz, es la muestra mas grande de amor para toda la humanidad. Sencillamente, "el don inefable de Dios."

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