«Todo lo hizo hermoso en su tiempo: y aun el mundo dió en su corazón, de tal manera que no alcance el hombre la obra de Dios desde el principio hasta el cabo.» -Eclesiastés 3:11.
La creación de la tierra es la primera revelación que la Biblia da en relación a los tiempos. Dios ha creado mundos antes de la tierra con fines eternos en su sapiencia y eternidad, en los cuales, manifestó sus juicios a quienes fueron rebeldes ante su presencia (Hebreos 1:2). De hecho, la tierra tiene siete procesos; desde su creación inicial, hasta que llegue a su estado perfecto. La tierra fue acondicionada con el propósito de albergar a todos los seres creados que la habiten. Desde el principio, la tierra fue una pieza importante de toda la creación, y es vista en la Biblia como una obra de arte que muestra las características poderosas de su Creador (Romanos 1:20 y Colosenses 1:16).
Hay que recordar que el Creador es eterno, y que sus criaturas son temporales. Por lo tanto; con el correr de tiempo, la tierra ha visto sobre su faz un sin número de juicios y acontecimientos insólitos que encierran misterios insondables, porque son difíciles de entender. La razón del tema de los mundos se debe a las siete menciones de la tierra con sus procesos en el tiempo. Cada una de las etapas de la tierra; después de que fue creada, termina con juicios divinos inevitables. Dios no pretendía una creación imperfecta; sin embargo, desde sus primeros habitantes hubo pecado y fue necesario castigarlo con los juicios divinos. La tierra en sí misma revela la evidencia de el mundo físico y el mundo espiritual.
DIOS EL CREADOR
«En el principio crió Dios los cielos y la tierra.» -Génesis 1:1.
“Bereshit Bara Elohim Et Ha’shamaim Ve’et Ha’aretz”. — Contiene siete palabras en la revelación de la primera creación. Hay siete días en la restauración después del primer juicio, y hay siete generaciones desde Adán hasta Noé, que fue cuando llegó el segundo juicio a la tierra. El factor tiempo empezó después de la primera creación de la tierra. El orden de la restauración después de la creación del globo terráqueo, ha sido: Primero los cielos, después las especies sobre la tierra, y por último las estrellas en el firmamento (Isaías 40:21-22; Proverbios 8:22-30; Hechos 15:18; Efesios 3:9 y Hebreos 1:10 y 11:3). La Biblia dice: «Por la fe entendemos haber sido compuestos los siglos por la palabra de Dios, siendo hecho lo que se ve, de lo que no se veía.» -Hebreos 11:3. — Dios estableció el principio de todas las cosas con su sabiduría, su plan, sus propósitos; y así, con su palabra de poder inició la creación de los mundos.
Dios le pregunta a Job: “¿Dónde estabas cuando yo fundaba la tierra? — Házmelo saber, si tienes inteligencia.” -Job 38:4. — “…Cuando las estrellas todas del alba alababan, y se regocijaban todos los hijos de Dios?” -Job 38:7. — La Biblia siempre se refiere a Dios obrando con poder y sabiduría sobre todas las cosas, desde el principio de la creación (Salmo 104:5; Proverbios 3:19 y 8:22-23). Dios es eterno; y sus propósitos comprenden un proceso inédito en el tiempo, sobre todo lo que Él hace (Isaías 41:4, 22; 45:21; 46:10; 48:13: 51:13 y 60:9). El profeta dice: «Porque así dijo Jehová, que crió los cielos, él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la crió en vano, para que fuese habitada la crió: Yo Jehová, y ninguno más que yo.» -Isaías 45:18.
En el Nuevo Testamento; ya refiriéndose a Jesucristo, dice: “Porque por Él fueron criadas todas las cosas que están en los cielos, y que están en la tierra, visibles é invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fué criado por Él y para Él.” -Colosenses 1:16. — Dios (Elohim), es el Creador de todo lo que existe, desde lo invisible, hasta lo visible. Queda establecido desde el principio de la creación, los límites entre tiempo y eternidad. Dios ya existía en la eternidad, y solo hasta que empezó a crear la tierra, le dio inicio al tiempo. Se sabe de mitologías griegas, mayas, toltecas, Olmecas, etc., asuntos que no tienen más documentos fundamentados en el tiempo, y son comparadas a las teorías más recientes de la evolución.
Como una enseñanza básica de la Biblia, aquí les dejo con las siete fases de la tierra, desde que fue creada.
1- EL MUNDO ANGÉLICO
Génesis 1:1; es el inicio de la Biblia, y la primera revelación del Creador de la tierra, con un mundo de especies angélicas. Se considera que la tierra fue hecha para ser habitada por seres de una creación única, y con estirpes y jerarquías especiales. Desde su primera mención en el tiempo se habla de un mundo en una dimensión más cercana al Creador. En el mundo del principio todo fue perfecto, hasta que vino la rebelión de los ángeles (Ezequiel 28:13-14 y el capítulo 31). Esto fue lo que dio lugar a un juicio divino sin precedentes. El mundo de entonces fue anegado en agua (2 Pedro 3:6).
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2- EL MUNDO EN CAOS
La segunda faceta de la tierra es un misterio, y aunque hay revelación de su estado inicial, no queda claro todo lo que pasó, para llegar a su estado caótico. El caos reinó y la tierra estuvo en completo desorden. El juicio de Dios fue una confusión de oscuridad y desorden absoluto. El caos sobre la tierra, se debe a los juicios que Dios hizo sobre sus habitantes que fueron infieles a sus propósitos (Genesis 1:2). Las características de la tierra en caos dicen mucho, porque estaba vacía, desordenada, en tinieblas, y en abismos. Uno de lo seres creados por Dios ya dominaba sobre la tierra que estaba desolada, y esto sucedió mucho antes de que Dios restaurará la tierra (Isaías 14:15-17 y Ezequiel 28:11-20).
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3- EL MUNDO RESTAURADO
La faceta de la tierra más detallada; con la cual inicia la revelación de la Biblia, es un proceso de restauración y el comienzo de una nueva era para otros seres creados que la habitarían. En la tierra donde estaban reinando las tinieblas; Dios hizo una acondicionamiento ordenado, y colocó en un lugar específico un paraíso llamado: Edén (Génesis 2:8, 15 y Ezequiel 31:9). Cuando Adan y Eva como seres creados por Dios, le desobedecieron y pecaron transgrediendo su mandamiento; fueron echados del Edén, y puestos fuera del huerto para trabajar la tierra (Génesis 3:23 y 2 Corintios 11:3).
Si el paraíso llamado edén, donde estaba el árbol de la vida; no se encuentra sobre la tierra, es porque fue trasladado al tercer cielo (Génesis 2:9, 3:17, 22, 24; Apocalipsis 22:2 y 14). Este huerto en el Edén es llamado en la Biblia, el Paraíso de Dios. Jesús se lo mencionó al ladrón moribundo que creyó en Él (Lucas 23:43). Se dice que el apóstol Pablo fue arrebatado y llevado al paraíso del tercer cielo (2 Corintios 12:4). Ese es el paraíso que está prometido para todos los vencedores (Apocalipsis 2:7).
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4- EL MUNDO ANEGADO
La Biblia menciona las profundidades del Mar y les llama abismos, y a la retención de las aguas en los cielos les llaman fuentes (Génesis capítulos 7 y 8). El juicio de Dios sobre la tierra vendría con la lluvia para raer o arrasar con todas las especies terrestres a causa de la perversion humana (Génesis 6:5-8). Dios le ordenó a Noé que hiciera un Arca para preservar la vida de las especies, incluyendo las aves de todas las especies. El primer diluvio de juicio sobre el mundo angélico fue devastador y más extenso que el diluvio en los tiempos de Noé, porque acabó con todo lo que tenía vida sobre la tierra. Sin embargo, el diluvio en los tiempos de Noé duró un año y diez y siete días, y no lo destruyó todo (Génesis 8:11 y 22 y 9:3).
Noé metió en el Arca a dos de cada una de las especies de animales, macho y hembra para preservar y multiplicar las especies (Génesis 6:19-20). La excepción serían los animales limpios; de los cuales, Noé tomó de siete en siete las especies, macho y hembra, y de los animales impuros de dos en dos cada especie, macho y hembra también. Noé metió suficiente comida para toda su familia y para los animales también (Génesis 6:21-22). Fue hasta que Noé hubo cumplido con lo que Dios le mandó, que el juicio de Dios cayó con el diluvio y todo fue destruido, incluyendo los reptiles y las aves del cielo (Génesis 7:17-24). Dios determinó que la tierra y el hombre vivirían y que no destruiría la creación por completo, como lo había hecho esta vez (Génesis 8:21).
5- EL MUNDO ACTUAL
Noé con su familia y todas las especies de animales que preservó en el Arca, iniciaron una nueva tierra (Génesis 8:13-20). Dios se agradó de Noé y sus sacrificios, y prometió no enviar otro juicio de destrucción sobre la tierra (Génesis 8:21). Además, la tierra continuó su curso de producción vegetal con las estaciones, el frío y el calor, y el día y la noche (Génesis 8:22). Dios estableció un pacto para no enjuiciar al mundo de los humanos con agua otra vez (Génesis 9:12). La tierra después del diluvio continúa en la manera en que Dios la estableció (Eclesiastés 1:4; Salmo 104:5). Sobre ésta misma tierra Dios establecerá la paz y la justicia permanente en el futuro (Isaías 9:6-7; Daniel 7:13-14 y Apocalipsis 11:15; 21:3 y 22:5).
6- EL MUNDO EN FUEGO
«No hay hombre que tenga potestad sobre el espíritu para retener el espíritu, ni potestad sobre el día de la muerte: y no valen armas en tal guerra; ni la impiedad librará al que la posee.» -Eclesiastés 8:8. — Dios tiene el control de la vida humana, pues a cada uno lo ha creado con propósitos. Los cuerpos creados son temporales, y son enjuiciados con su destrucción. Los espíritus también fueron creados; pero, tienen una eternidad después de los juicios que vendrán a decidir su destino final para la eternidad (2 Pedro 3:7). La Biblia, dice: «Mas el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella están serán quemadas.» -2 Pedro 3:10. — Los juicios del Apocalipsis dejarán una tierra en caos, y los seres humanos tendrán terror y verán con sus ojos las fuerzas de la maldad infestando la tierra con todo su odio. Jesús profetizó el juicio de la gran tribulación, como algo que nunca antes hubo, ni lo habrá (Mateo 24:21-29). Solamente con la segunda venida del Mesías prometido en las Escrituras, serán removidas la huestes a donde pertenecen, y Él reinará por siempre.
7- EL MUNDO NUEVO
La promesa de Dios fue sustentada por los apóstoles, y uno de ellos dice: «Bien que esperamos cielos nuevos y tierra nueva, según sus promesas, en los cuales mora la justicia.» -2 Pedro 3:13. — La Esperanza del evangelio de Jesucristo es única y trasciende la creación de los mundos. No es utopía, porque no es un plan de gobierno humano que promete un sistema ideal y perfecto de armonía social. Dios no es hombre para mentir, Él dijo, y Él lo hará (Números 23:19 y Salmo 33:9).
Se trata de la promesa del Creador, que llevará a cabo su plan a la perfección, y nadie lo podrá evitar. La visión del apóstol Juan, dice: «Y vi un cielo nuevo, y una tierra nueva: porque el primer cielo y la primera tierra se fueron, y el mar ya no es.» -Apocalipsis 21:1. — Dios tiene definido el fin de la tierra, a un estado concebido desde el principio en su corazón, con habitantes que serán recompensados después de que pasaron su prueba en el respectivo tiempo de su existencia.
EL MESÍAS CREADOR FUE PROMETIDO DESDE EL PRINCIPIO
El verdadero principio está en: Juan 1:1; y el final de lo que comenzó en el tiempo está en: 1 Corintios 15:24.
Las cosas invisibles, son la energía creativa de lo visible. La energía superior del amor, la bondad, y la paz; solo provienen del Creador. Dios creó la tierra con el propósito de establecer la justicia y la paz permanente. El testimonio del propósito divino fue transmitido desde los inicios de la creación. La Biblia contiene profecías de la manifestación de la obra divina entre sus criaturas, de forma misteriosa y visible desde el principio de los mundos (Miqueas 5:2; Hebreos 9:26; Apocalipsis 3:14 y 13:8).
El principio no existiría, si no estuviera la revelación de la existencia del verdadero autor y creador de todo, mucho antes de todo lo creado (Juan 1:1-2; 1 Juan 1:1, 10 y 2:13). Por tal motivo, la fe cristiana sustenta la doctrina de la creación de todo lo que se ve, y que también es sostenido hasta hoy por el poder de la palabra (Hebreos 1:10; 4:3). Jesús respaldó la revelación de la creación del principio declarado en Génesis (Mateo 19:4 y 24:21). Jesús habló del diablo como un homicida desde el principio de la creación (Juan 8:44 y 1 Juan 3:8). Por lo tanto, la veracidad de las Escrituras se mantiene firme.
DIOS DOMINA SOBRE LOS MUNDOS
«He aquí que en sus siervos no confía, y notó necedad en sus ángeles.» -Job 4:18.
Los primeros que pecaron fueron ángeles. La adversidad en contra de Dios no es de un solo personaje de maldad (Satanás solo es un título: adversario), sino de reinos o imperios conformados por poderes sobrenaturales invisibles que dominan los mundos. La Biblia dice: «Porque no tenemos lucha contra sangre y carne; sino contra principados, contra potestades, contra señores del mundo, gobernadores de estas tinieblas, contra malicias espirituales en los aires.» -Efesios 6:12. — La lucha de los seres humanos naturales es contra ellos mismos, porque viven y dependen del mundo en que viven. La lucha de los seres humanos espirituales es contra lo invisible, porque ellos ven más allá del mundo natural y físico, con la esperanza de una vida mejor.
La maldad en sí misma, es una potestad que probó hasta los ángeles que Dios creó, y cayeron en la fuerza de su gravedad perversa. La maldad cambió el corazón del querubín protector y lo convirtió en diablo. Ahora el diablo tiene un imperio de maldad en los aires, como el principe de las tinieblas (Efesios 2:2). El diablo ha usado la potestad del imperio de la muerte como su aliado (Hebreos 2:14). La muerte es una potestad que será destruida al final (1 Corintios 15:26). El Mar y el infierno son otras potestades que tiene alianzas con la muerte (Apocalipsis 20:13-14). Y por último. La Biblia menciona cuatro veces el lugar del destino final de las potestades de maldad que destruyeron los mundos (Apocalipsis 19:20; 20:10, 14 y 15).
CONCLUSIÓN
El cierre de conclusión más adecuado, son los versos de la Biblia que dicen: «18 Porque tengo por cierto que lo que en este tiempo se padece, no es de comparar con la gloria venidera que en nosotros ha de ser manifestada. 19 Porque el continuo anhelar de las criaturas espera la manifestación de los hijos de Dios. 20 Porque las criaturas sujetas fueron á vanidad, no de grado, mas por causa del que las sujetó con esperanza, 21 Que también las mismas criaturas serán libradas de la servidumbre de corrupción en la libertad gloriosa de los hijos de Dios. 22 Porque sabemos que todas las criaturas gimen á una, y á una están de parto hasta ahora. 23 Y no sólo ellas, mas también nosotros mismos, que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, es á saber, la redención de nuestro cuerpo.» -Romanos 8:18-23. — Dios sujetó a toda la creación a lo temporal; sin embargo, dio la esperanza de una liberación; por lo tanto, la tierra espera su redención junto a los hijos de Dios.
*Los versos bíblicos corresponden á la versión Reina Valera.
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